Vídeo RELACIÓN CON LOS PROFESIONALES HTA 3

Ana reconoce que sigue acudiendo a su antiguo médico de cabecera ya jubilado porque dice que con sólo mirarla, tras más de 30 años atendiéndola, sabe lo que le pasa. Es la misma tranquilidad que le proporciona su oculista privada con la que se comunica si es necesario a través del chat de Whatsapp. Ella siente que hay diferencias en el trato que recibe con respecto al hospital público.

P:Entonces es que claro casi todos los meses, o cada tres meses, ella siempre me quería ver por la tensión, porque siempre me la encontraba un poquito alta y entonces por eso quizás tengo yo más confianza. Y en el hospital no es lo mismo. En el hospital yo soy un número, como mucha gente que va al hospital. Yo soy un número y punto, me llamo “fulanita de tal, tienes esto” y ya está. De ahí no te doy más confianza. Pienso.
E: El trato es diferente.
P: Es totalmente diferente.
E: Y de cara a lo que le sucede, sea la tensión ocular o incluso la propia hipertensión en sí, ¿cuáles serían esas diferencias?
P: A la doctora del hospital, no... la tenía un día a veinticinco y dice “la tienes a veinticinco” y no le dió importancia. No sé. Y sin embargo la otra a lo mejor con veinte ya está preocupada. Entonces yo soy un número, en la Seguridad Social somos números, un historial y ya está.
E: ¿Los tiempos de atención también cambian? Durante la, quiero decir el tiempo de consulta
P: Sí, mucho, mucho, poquito tiempo.
E: En el hospital, por lo que me está comentando.
P: Ujú, a lo mejor en cinco minutos entro y salgo, porque ella a lo mejor te mira pero anterior… te manda a dilatarte la pupila, te hace, vas pa´ fuera, vuelves otra vez adentro te dilatan otra vez la pupila, vuelves a entrar, te vas a sacar, a hacerte el fondo de ojos o las fotos estas que te hacen, sales, y a lo mejor a las dos horas, dos horas, te vuelve a llamar. Entras, “estás igual o la mácula está igual como la última vez o parecida y tal, vamos a ver, a esperar al próximo mes que yo también me voy de vacaciones y tal”, y nada, me toma la tensión y nada más que eso. Ella no me hace sino eso. Sí ve cómo, las fotos a ver como tengo el ojo y tal, yo no te digo que no la mire y, pero nada más.
E: Y en cambio ¿con la oftalmóloga privada incluso...?
P: Te explica.
E: Ah
P: Te explica un montón de cosas, “mira aquí esto”, lo que pasa es que yo me olvido de muchas cosas porque son, “mira aquí tienes la mácula, mira en este estabas mejor, en este estabas peor, aquí te subió, aquí te bajó, antes veías un ochenta, ahora estas viendo a lo mejor un veinte”. Es totalmente diferente. Y yo lo entiendo porque a lo mejor van toda clase de personas y a lo mejor ese día a lo mejor ella ve veinte o treinta, es que ella no se puede estar tampoco, estar media hora conmigo. Ni conmigo ni con nadie. Pienso yo que es eso, que están muy saturados. Pero lo que no veo lógico es que me saque la foto y después para volverme a llamar esté dos horas esperando, solamente pa´ decirme cómo tengo, como han salido el fondo de ojos… y todo esto. Si ya lo tienes allí me llamas. Pero bueno, hay que esperar.
E: Y en cambio con la privada incluso se whatsappea
P: Sí, si me pasa algo, sí.
E: Se lo ha ofrecido como un recurso...
P. Sí.
E: De urgencia.
P: Sí, yo no lo tengo, lo tiene mi marido. El de...su teléfono y cualquier cosa. El día de (nombre de isla), fue ella la que me dijo todo, por Whatsapp.

Compartir:

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad