Inma describe perfectamente ese pensamiento sobre el deseo de tener hijos y el sentimiento de vacío que siente por no tenerlos.
P: Es que lo que me dicen mis amigas y demás, dicen “no pienses tanto en el tema porque cuanto más pienses, menos te vas a quedar”, y digo “coño, pues voy a ...”, entonces por eso estoy trabajando, estoy estudiando, ¿sabes?, para entretenerme. Ahora empiezo al gimnasio, para este mes, entonces cuanto más cosas hago como que más me … me distraigo y no pienso en el tema, pero lo tienes interior, siempre lo tienes interno. Ves a una embarazada y ya estás pensándolo tú, que “cuándo me veré yo así”. O ves un bebé recién nacido y digo “jo, si fuese mío”. Son cosas de envidia sana, le llaman, que yo no soy del tipo de envidiosa de “mira ay que chalet tiene esta” ni nada de eso, pero sí sientes la necesidad de “joder, y si yo pudiera”, y “cuándo me tocará a mí”, “y si no puedo, jo, qué desgracia”, ¿no?, en el sentido de …
E: De que decías que te faltaba algo.
P: Sí, me falta, me falta algo … tengo un vacío. Por mucho que lo quiera llenar no lo puedo llenar con nada.